La fibra de vidrio es uno de los materiales que se utilizan con mayor frecuencia en los proyectos de aislamiento acústico o térmico.
Está compuesta por arena de sílice, carbonato de sodio y caliza. A través de un proceso de calentamiento en el que estos materiales llegan a alcanzar los 1500 grados centígrados, surgen los miles de filamentos que, una vez entrelazados, forman la fibra de vidrio (también llamada lana de vidrio).
Además de ser un material ignífugo, presenta una serie de ventajas:
Ventajas de la fibra de vidrio
1.- Es un material que no se pudre ni se deteriora gracias a la resina de la que está compuesta. Por lo que resulta muy útil para el refuerzo de otras estructuras en construcción.
2.- Es muy ligero por lo que resulta fácil de transportar e instalar.
3.- No conduce la electricidad, por lo que se utiliza también como aislante en las instalaciones en las que se busque un aislante eléctrico.
4.- Además apenas necesita mantenimiento, incluso aunque se use en exterior.
5.- No resulta tóxica y es un material respetuoso con el medio ambiente tanto es su fabricación como en su utilización como aislante.
6.- No es inflamable, no genera humos ni gases nocivos. Lo que le permite retrasar la propagación del fuego sobre todo en aquellos casos en los que las llamas vengan del exterior.
La Fibra de Vidrio como Aislante Térmico
La fibra de vidrio presenta una alta resistencia térmica y una baja conductividad, por lo que dificulta el flujo del calor. Por esta razón se convierte en un perfecto aislante térmico.
Las propiedades de la fibra de vidrio le permiten convertirse en uno de los principales componentes utilizados para el aislamiento térmico de edificios de manera exterior. Principalmente por su resistencia a la exposición del sol.
Las propiedades aislantes de este material lo convierten en un aliado para el ahorro de energía, pues nos permite mantener espacios climatizados durante más tiempo. De esta manera ahorraremos costes en calefacción y climatización.
La Fibra de Vidrio como Aislante Acústico
La fibra o lana de vidrio posee una buena absorción acústica, por lo que nos permite controlar el ruido en las instalaciones. Su cualidad absorbente y su elasticidad producen un efecto disipante del ruido.
Con el aislamiento acústico de una vivienda con fibra de vidrio, o cualquier otro tipo de instalación, conseguiremos:
- reducir el ruido aéreo,
- eliminar los tiempos de reverberación,
- reducir el ruido que llega desde el exterior
- y reducir el ruido producido dentro de la vivienda y que llega al exterior.
Generalmente, la fibra de vidrio es instalada en la mayoría de edificios en paredes y fachadas, techos y falsos techos, tabiques y medianeras, sótanos, etc.
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